martes, 24 de mayo de 2011

¿POR QUÉ UNA ÉTICA PROFESIONAL EN NUESTROS TIEMPOS?

La ética y la moral son elementos imprescindibles que rigen nuestra conducta humana tanto personal como profesional ya que nos hacen distinguir entre lo bueno y lo malo de aquellos acontecimientos que surgen todos los días en nuestra vida cotidiana. Sin estos dos elementos, el hombre no desarrollaría con lealtad sus actividades de labor y de familia, sino que actuaría de manera independiente viendo solamente por su bienestar, intereses personales, poder, egoísmo e incompetencia.
Para poder actuar de manera ética se debe desarrollar el valor de la honestidad con el fin de tomar decisiones racionales que tengan congruencia con nuestro código de ética para obtener como resultado relaciones de respeto y colaboración entre todos los integrantes del equipo laboral.
Por lo tanto, para poder entender el porqué se necesita de una ética profesional en nuestros tiempos debemos de analizar las necesidades y los problemas que se deben de enfrentar para poder llegar a tomar decisiones conscientes con principios y valores que beneficien nuestra conducta y que no dañen nuestro compromiso personal para mantener el deber y derecho.

Elmy Rosario Galarce, puertorriqueña, profesora del Departamento de Administración de Sistemas de Oficina de la Universidad de Puerto Rico del Recinto de Humacao, autora del artículo ¿Por qué una ética profesional en nuestros tiempos? del Exégesis, X Aniversario; menciona que la conducta humana encuentra pequeñas diferencias en el uso de las palabras ética y moral.
Ética significa carácter, hábito y modo de ser; y moral significa costumbre. Por lo tanto, ambas palabras al unirlas significan que el hombre actúa por medio de hábitos hablando en el aspecto ético. Podemos decir entonces, que la ética evalúa lo que está bien y lo que está mal en base a la conducta y hábitos de las personas con respecto a los acontecimientos que surgen todos los días, específicamente en la actividad profesional.
Nosotros como profesionistas y trabajadores, tenemos y mantenemos un código de ética que nos ayuda a actuar de manera correcta tanto en nuestras labores como con nuestro equipo de trabajo fomentando los valores y cumpliendo los deberes de la profesión, sin el no pudiéramos ejercer nuestros derechos y como consecuencia vendrían problemas de ética. Por lo mismo, debemos actuar con honestidad  en nuestras tareas, debemos ser congruentes y éticos con lo que decimos y con nuestros actos, porque si no lo eres  por dentro, muy difícilmente podrás transmitir honestidad hacia el cliente y hacia tu equipo de trabajo.
No debemos dejar fuera los valores que influyen en nuestro comportamiento, sino que hay que analizarnos y observar si nuestras experiencias, conocimientos y cultura nos ayudan a tomar decisiones correctas de una acción. Los valores de la gente que nos rodea es otro factor importante en nuestras vidas, ya que algunas veces nos dejamos llevar por nuestros amigos, familia, compañeros de trabajo, etc. Y por último, no dejar atrás el código de ética que cada uno de nosotros tenemos que nos ayuda a comportarnos de cierta manera dentro de nuestra área de trabajo, porque sin él, podemos caer fácilmente a tomar decisiones anti éticas.
Como se mencionó anteriormente, si no actuamos de acuerdo a nuestro código de ética, podemos caer en problemas que pueden perjudicar nuestra actividad laboral trayendo consecuencias. Pero laboralmente, es muy fácil caer en ellos ya que el encubrimiento, los intereses, sobornos, falta de lealtad, corrupción, entre otros; algunas veces tienen mayor peso que el código de ética. Y este tipo de acciones no discrimina profesión ni actividad, se puede presentar en cualquier ámbito y cualquier puesto de trabajo donde entre en juego el egoísmo y el poder.
Por lo tanto, debemos de tener cada uno de nosotros bien establecidos nuestros principios y bases de formación de ética profesional como lo es la honestidad, integridad, compromiso, lealtad, imparcialidad, dedicación, respeto, responsabilidad, emprendurismo, confianza y ser modelo ante todo,  sirviendo a una comunidad que es nuestra área de trabajo, a los clientes que son el principio y la unión con la empresa y no dejar pasar que somos miembros de una sociedad que se basa en la ética y moral en todo momento.

Desde niños nos han enseñado qué acciones son correctas y cuáles son incorrectas al momento de actuar y de tomar alguna decisión, desde lo más trivial que es no mentir, hasta acciones importantes que pueden repercutir en tu vida ya de adulto, como lo son los excesos, el robo, la irresponsabilidad, el soborno, etc. Ahora que convivimos y tenemos contacto día a día con compañeros de trabajo, tenemos que tener bien establecidas nuestras bases y principios para no caer en acciones anti éticas que nos puedan traer consecuencias. Es muy importante no dejarnos influenciar por cuestiones que al principio pueden verse beneficiosas, pero con el tiempo pueden traer repercusiones tanto laborales como personales que pueden dañar hasta nuestra imagen con los demás.
Es por esto que debemos de seguir nuestro código de ética no enseñado ni estudiado a través de un libro, sino llevarlo a cabo de manera personal y que hemos aprendido durante estos años de experiencia profesional y ejercerlo bajo acciones correctas que estén ligados bajo nuestra ética y moral trabajando bajo un fin común tanto para la comunidad en la que laboramos como de manera personal. 
Por lo tanto, es muy importante estar conscientes de que nuestros valores tienen que estar fijos y que debemos de tener una congruencia tanto en lo que decimos como en lo que actuamos para poder cumplir la ética profesional en nuestros tiempos. 

martes, 1 de marzo de 2011

la dignidad de la persona humana

El concepto de dignidad de la persona se debe de definir y conocer por todos nosotros ya que de ahí parten las bases culturales y morales de las sociedades de los países,  y también del cómo la Iglesia da al ser humano su dignidad como origen de los derechos del hombre.

Pero el concepto de dignidad puede sufrir cambios o malentendidos dependiendo de los intereses personales, por ejemplo, utilizar este concepto con el fin de defender el aborto diciendo que se evitará una vida indigna para el bebé ó defiendo los derechos de los animales basándose en que los humanos y los animales somos iguales. Todos estos hechos son el resultado de no saber distinguir entre los hechos y las preferencias personales.
Para poder definir que es la dignidad humana se deben de entender primero estos tres temas:
La dignidad como puente entre la antropología y la ética.
La palabra dignidad viene del latín dignitas, de la raíz dignus que significa grandeza, excelencia y que eres merecedor de un tipo de trato. Por lo tanto, podemos definir dignidad como una excelencia que merece respeto o estima. Se puede interpretar que esperamos una respuesta particular de algo o que debemos ser tratados siempre como personas. También se relacionan los derechos del hombre. Si una persona merece un trato especial, la manera de dar ese trato viene especificada en los derechos humanos de manera que el hombre se desarrolle plenamente e integralmente.
La dignidad como rasgo característico del ser humano.
La teología nos explica como el ser humano es la única criatura hecha a semejanza de Dios que es capaz de amar, ser libre y contar con un espíritu, por lo tanto la dignidad de la persona no se da de manera accidental sino que surge de la misma naturaleza de hombre. Este pensamiento no es algo que se ha desarrollado en el presente; siglos atrás franciscanos y teólogos definieron que el hombre tiene rasgos distintivos que lo hacen diferentes de los demás seres vivos, no solamente de grado sino también de esencia, por lo tanto, la dignidad es una característica única de las personas. Se puede hablar de tener una ética hacia el medio ambiente o a los animales, pero no de una dignidad porque no cuentan con moral o raciocinio.
La dignidad poseída en igual medida por todos los miembros de la familia humana.
Todos nosotros participamos de igual manera en la humanidad, por lo tanto todos debemos de tener de manera equitativa la dignidad, pero nosotros como personas le hemos quitado esa dignidad a otros de manera repetitiva. Como es el caso de los nazis contra los judíos, o la raza blanca contra la raza negra y hoy en día el aborto o la guerra. La dignidad no se mide por medio de tu talento o pertenencias, ni el color de piel o la religión, sino que se mide por medio de la naturaleza racional y espiritual de las personas, ya que de otra forma, no existirían los derechos humanos o variarían de persona a persona.
La dignidad es una característica particular que nosotros tenemos como seres humanos y es lo que nos da esencia y razón para estar bien con nosotros mismos y con los demás. Pero si siento y observo que en los tiempos que estamos viviendo ese concepto de dignidad o lo que nosotros conocemos está desapareciendo, ya que están aumentando las guerras internas y externas entre los países, mutuamente nos hacemos daño y no nos damos cuenta en las consecuencias o daños que estamos causando a nuestra humanidad. Considero que si debemos de cuidar lo que tenemos y lo que nos ha dado Dios, ya que como dice en la lectura, Dios nos hizo a semejanza de él, y eso es algo que nos da el privilegio de tener una moral, una razón y un espíritu que nos hace diferentes a los demás seres que habitan la tierra.  Por lo tanto, debemos iniciar con examinarnos cada uno de nosotros y analizar si actuamos y tratamos con dignidad a las personas que nos rodean ya que si queremos un cambio, debemos de empezar a hacerlo por nosotros mismos.